Dolor lumbar … es lo peor. La mayoría de los corredores lo experimentan en algún momento u otro.
En pocas palabras, no tienen que vivir con dolor lumbar cuando corren. El entrenamiento de fuerza, la corrección de malas posturas y el trabajo en movilidad son todas formas de volver a correr sin dolor.
Una columna vertebral neutral reduce el riesgo de lesiones y dolor de espalda
Un culpable común de una lesión en el corredor es la debilidad de los músculos centrales, más específicamente los músculos estabilizadores profundos. Estos músculos son responsables de mantenernos erguidos y equilibrados con un mínimo bamboleo de lado a lado o de un lado a otro, y tienen puntos de unión en toda la columna y la pelvis.
Muchos de nosotros tendemos a “por defecto” a una espalda baja sobreextendida y ligeramente arqueada, lo que hace que el núcleo se apague, dejando que la parte baja de la columna absorba cada paso del impacto mientras corres.
Reducir este arco y encontrar una posición de columna más neutral es fundamental si vas a seguir corriendo a largo plazo y sin lesiones.

Fijación hueca para fuerza central
Este ejercicio pondrá otra variación en la prueba de compresión a tope. El propósito de este ejercicio es activar esos músculos abdominales profundos, que sostienen y protegen su columna para que no caiga en una posición peligrosa.
Además, la ayuda adicional de su núcleo quitará parte de la carga de los músculos de la espalda baja, que, si se deja absorber el impacto de correr por sí solo, puede conducir fácilmente a estrés repetitivo y lesiones.
Movimiento dinámico para la movilidad de la cadera
La otra parte del rompecabezas son sus caderas. Sin duda, están apretados y ejercen una presión adicional y tensión en la columna vertebral. Es bastante común en estos días que cuando no están corriendo o haciendo ejercicio, están sentados. Pensemos en lo que eso significa.
Dado que los flexores de la cadera, los músculos en la parte delantera de las caderas, pasan la mayor parte del día en una posición acortada, adoptan esa posición por defecto incluso cuando están de pie.
Cuando vas a correr y estás en una posición erguida y alargada, la parte baja de la espalda se siente anulada y tirada por ellos. El resultado: la parte baja de la espalda termina trabajando más duro para contrarrestar el tirón desde la parte delantera de las caderas.